¿Cómo sentirlo asi?
Se fue mi
nonna, pasó el ser de luz que me iluminó doblemente toda mi vida y ahora estoy segura que lo hará mucho mas. Siento tan cerca, mucho mas que antes, pero cómo te voy a extrañar. No tengo mas que recuerdos lindos, frases ocurrentes y salidas sabias junto con anécdotas que siempre recordaré.
Voy a extrañar nuestras charlas, ese ida y vuelta excepcional y
único. Sos mi mujer de la que heredé toda energía y amor: humor, carácter,
amor, servicio, incondicional, fuerte, sonriente, amable… algunas de tus
características.
Me llevo los valores arraigados en mi, esos momentos de café con
leche, de manos agarradas fuerte, de besos varios por arriba de la mejilla
(caricias en el ojo, risa espontanea), abrazos fuertes en tu pecho, siestas
eternas en tu rincón, dormir juntas y pedirte que te des vuelta porque
roncabas, tus pedos en cualquier momento y lugar, que no te gustara cocinar y
que te saliera tan rico porque lo hacías con amor, el caminar rápido, caídas y
en segundos nuevamente de pie (sin lesión alguna aparente) risas y no es nada.
En musculosa y mangas cortas en pleno invierno, juego de chinchón entre nietos
y hacer trampa para sacarte las monedas. Las pizzeles y “le ganamos a las dos”,
el querer escaparnos cuando nos querías dar la comida de los perros, divertirme
atándote los ruleros, que me vayas a buscar a la escuela, que me esperes en la
puerta. Que hayas que tenido que soportar mis caprichos, peleas y llanto porque no quería volver a Rosario los domingos a la noche, por explicarme con amor que
eran las dos am y que mi papa no iba a venir a buscarme ya, por sufrir por mi y
con paciencia amarme. Por estar conmigo al pie cuando mi mama casi se va, y
cuando se fue de viaje dos meses a Italia, por cuidarme en mis enfermedades,
por consolarme cuando rendía mal en la facultad,
por poner siempre la otra
mejilla y enseñarme a demostrarle a la gente que nosotros somos mejores personas; por explicarme que tarda en llegar
simplemente para que lo valores, por confiar en mi, por seguirme e las
locuras (hasta desde la cama), por apoyarme siempre, por transmitirme tu
esencia mas pura que hoy sigue en mi en cada grito suspirado, en cada paso
apurado, en cada palabra dicha, en cada abrazo dado, en cada beso, en cada
mirada, gesto … en fin … en todo lo que signifique amor vos estas en mi …
… Gracias!
Te amo por siempre mi nonna linda <3
Volá libre …. Como vos lo hiciste por mi, hoy yo te suelto a vos
para no olvidarte jamás!
... Los
helados en promoción de la santa maria
... Conocer
tu casa, el club italiano, ese pasadizo secreto que nos dejo en tu habitación y
con tan solo escucharte saber lo feliz que fuiste ahí sin nada mas que tu
familia
... Por
demostrarme que se puede morir de pie a pesar de pasar 4 años en cama
... Simplemente
por enseñarme a honrar la vida! … y en eso estoy #vivirenviaje
PD.: Esta carta la escribí dos días después de que la nonna arranque vuelo, y como nada es casualidad, el mismo día que ella se largó a volar, una gaviota con la pata lastimada apareció en el barrio, Lucho le dio asilo y cuando nosotros volvimos
del pueblo al día siguiente, la vimos escondida en un rincón y la
dejamos pasar la noche, nos dimos cuenta que en realidad si podía caminar y
decidimos llevarla al mar.
Frank (mucho mas coraje que yo) la tomo en sus
manos, y cuando salimos y vio el mar empezó a moverse! La llevamos a la piedra
de la punta justo en donde ahí ya empezaba el mar. Tal es así que ella camino
unos pasitos, hizo caca, elongó alas y cuando menos lo esperábamos ya se nos
había perdido de nuestra vista.
Una vez una
amiga que sabia de mi relación intensa con mi nonna y de la angustia anticipada
que vivía de tan solo pensar el momento en que no la iba a ver mas, me dijo: “Tu nonna no se va a
perder una! Hasta si te casaras aparecería como mariposa para estar cerca tuyo”
Así lo
sentimos, la Agnese se vino a despedir y a demostrarnos que morir es solo un
paso de transformación, un vuelo al reencuentro en otra estación …